RESISTIENDO AL GOBIERNO

¿Cómo Puede un Cristiano Interpretar Romanos 13:1-7?

En un articulo publicado anteriormente (www.cuttingedge.org/sp/p186.htm) analizamos un tema que sigue siendo controversial—la responsabilidad que el Cristiano tiene de obedecer la autoridad gubernamental como se muestra en Romanos 13:1-7

La Declaración de Independencia de nuestra nación dice que debemos “quitar” a cualquier gobierno que amenace con privarnos de nuestros derechos a la “vida, libertad, y la búsqueda de nuestra felicidad.” El texto que contiene ese sentir dice lo siguiente:

Siempre que una Forma de Gobierno cualquiera se vuelve destructiva a estos fines, es el derecho del Pueblo alterarlo o abolirlo, y de instituir un nuevo Gobierno, que coloque sus cimientos en tales principios, y organice sus poderes en tales maneras, como ellos vean que es más adecuado para trabajar en favor de su Seguridad y Felicidad. La Prudencia, de hecho, dictará que los Gobiernos establecidos por mucho tiempo, no deben ser cambiados por causas ligeras y pasajeras; y según nos ha enseñado la experiencia, la humanidad esta dispuesta a sufrir, mientras que se puedan sufrir esos males, que vengarse aboliendo las formas a las que están acostumbrados. Pero cuando un largo tren de abusos y usurpaciones, buscan invariablemente el mismo Objetivo de reducirlos bajo un total Despotismo, es su derecho, es su deber, quitar de en medio tal clase de Gobierno, y proporcionar nuevos Guardianes para su futura seguridad”.

Sin duda alguna, lo que nuestros fundadores quisieron decir con el termino “quitarlos” fue el de rebelarse en contra del Rey George de Inglaterra y resistirle a la fuerza, con armas.

¿Sin embargo, dicha rebelión y derramamiento de sangre es autorizada por la Palabra de Dios? Y ya que nuestras preciadas libertades están claramente en peligro de ser quitadas por un gobierno que sigue una agenda Iluminista, seria otra “justa rebelión” la que se haría? A Juzgar por el numero de artículos y sermones en la Internet que tocan este tema, uno podría fácilmente tener la idea de que algunos predicadores están exhortando a los creyentes a tomar esos pasos. También incidentes como aquellos en Ruby Ridge, Waco o en la Ciudad de Oklahoma, demuestran muy ilustrativamente que ciertos grupos militares lo ven de esa manera y defienden el derrocamiento de nuestro gobierno.

Pero aunque la Biblia enseña los principios de (1) rehusar obedecer cualquier ley que trate de hacernos desobedecer a Dios, y (2) que bajo esas circunstancias tenemos el derecho de huir si los oficiales buscan apresarnos. ¡La Biblia no enseña la insurrección armada!’

“Teme a Jehová, hijo mío, y al rey; No te entremetas con los veleidosos.”

Proverbios 24:21

En Hechos 5:29 Pedro y los Apóstoles le dijeron Al Sanedrín, “Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres,” cuando se les mando a que dejasen de predicar que Jesús de Nazareth era el Cristo. Y por no seder fueron “azotados” (vs40)—un azote que involucraba varios latigazos en la espalda con un fuete. En Deuteronomio 25:3 La Ley de Moisés limitaba el número a 40 “azotes” y los Judíos tradicionalmente se detenían en el 39 para evitar ir más lejos, pero no obstante al número de azotes que recibían, era una brutal paliza. ¿Así que, cual era su reacción a tal opresión?

“Y ellos salieron de la presencia del concilio, gozosos de haber sido tenidos por dignos de padecer afrenta por causa del Nombre. Y todos los días, en el templo y por las casas, no cesaban de enseñar y predicar a Jesucristo.” Hechos 5:41-42

Primero que todo debemos notar que lo que ellos dijeron lo dijeron al concilio del

Sanedrín y no a los oficiales del gobierno Romano. ¡Haber hecho tal clase de comentario a Poncio Pilato o a uno de sus súbditos hubiese sido lo mismo que un suicidio! Se ha dicho que la discreción es la mejor parte de la valentía y declarar que se tiene como intención Predicar a pesar del edicto del Sanedrín es un asunto totalmente diferente al decir claramente que se intenta desobedecer a la ley Romana. Lo peor que al Sanedrín le estaba permitido hacer era repartir unos azotes, pero el gobierno Romano regia con mano de hierro y usualmente pedía la pena capital por tales casos de desobediencia civil. Así que lo inteligente seria permanecer bajo el “Radar Romano” mientras se seguía obedeciendo el mandamiento del Señor de predicar el Evangelio.

En ningún lado del Nuevo Testamento se menciona que los Apóstoles participaron de una abierta rebelión en contra de sus perseguidores Romanos, o enseñando a otros a hacerlo, aunque con frecuencia eran severamente perseguidos y en la mayoría de los casos eran asesinados por ese gobierno. Cada vez que ellos eran puestos a prueba por el sistema legal Romano, ellos eran respetuosos y tomaban su castigo sin apoyar la rebeldía de otros. Para evitar desobedecer a Dios, ellos eran frecuentemente forzados por las circunstancias a huir y / o esconderse bajo tierra, “resistiendo” así los diferentes edictos Romanos en contra suya, pero ellos nunca tomaron armas y trataron de defenderse.

Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas. 2De modo que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios resiste; y los que resisten, acarrean condenación para sí mismos. Romanos 13:1-2

¡El punto que debemos notar, es que ellos no “resistieron” al gobierno Romano en el sentido que Romanos 13:1-7 prohíbe! Según el Diccionario Expositivo Vine de Palabras del Nuevo Testamento, la connotación de la palabra Griega antitasso traducida como “resistir” en el verso 2 (RV 1960) es como sigue:

“3. ANTITASSO, anti, contrario, tasso, arreglar, término de origen militar, formarse en línea en contra de, y encontrada frecuentemente en el papiro, se usa en la Voz Media significando situarse uno mismo en contra de, resistir, (a) de hombres, Hechos 18:6, “oponiéndose;”en otra parte resistir, de resistir potestades humanas, Rom. 13:2… (Énfasis mío)

Así que, aunque la Declaración de Independencia declara que no solo tenemos el derecho, sino también, la obligación de “quitar” por la fuerza un gobierno opresivo— si eso fuese considerado necesario por la mayoría—los creyentes deben responder a la autoridad Final de la Palabra de Dios y no participar si se necesita el derramamiento de sangre para lograrlo. ¿Por qué? Porque no importa cuan podrido este nuestro gobierno, este ha de jugar el rol que Dios le ha asignado en su Plan Soberano. Y cualquier intento de tomar acciones por nuestras propias manos de manera forzosa, desplazando un gobierno, El ha decretado que eso provocaría el juicio divino. Debemos ser buenos ciudadanos y ejercitar cada medio legal a nuestro alcance para tratar de mantener nuestra nación dentro de la línea. Pero al mismo tiempo debemos estar preparados para desobedecer cualquier ley que nos inste a desobedecer a Dios. La insurrección armada no es una opción.

Mi convicción personal es que los Estados Unidos de América ha de sufrir el juicio terrible de Dios por varias razones— No siendo la menor de ella, la rebelión que ha traído entre las personas por negar Su misma existencia. ¡Pueda que el Molino de Dios funcione lentamente, pero muele extremadamente bien!

Un buen gobierno y libertades personales son cosas maravillosas y debemos agradecer diariamente al Señor Jesucristo por permitirnos vivir en esta nación, pero tales cosas pierden importancia en comparación a nuestro deber de vivir para El y esparcir el mensaje del Evangelio. No podemos permitirnos estar excesivamente preocupados por la política y tratar de mantener la barca del estado a flote, porque este mundo no es nuestro hogar—solo somos peregrinos que estamos de paso.

La apatía de algunos creyentes hacia las responsabilidades como ciudadanos es mala, pero aun mas es la apatía hacia el plan y programa de Dios. Debemos ser diligentes en mantener un balance apropiado entre lo sangrado y lo secular recordando que no son iguales en su relativa importancia.

En realidad, la Iglesia primitiva ignoró el Imperio Romano y esparció las buenas Nuevas del Evangelio donde quiera que iba. Ellos no trataron de sembrar flores en el desierto formando comités de acciones políticas y organizando campañas de registro electoral. Y hasta donde se, ellos no habían tratado de poner a un Cristiano en una posición para que llegase a ser el próximo Cesar, para asegurar la paz y la tranquilidad de todos los hombres. No, solo se mantuvieron hablándole a las personas sobre Jesucristo y el pago que El hizo por ellos con Su sangre. Y si no estamos dispuestos a seguir su ejemplo, todas nuestras prioridades están equivocadas.

Nuestro Dios todavía esta en el trono y es infinitamente capaz de manejar las maquinaciones políticas del manicomio en el Potomac. ¡Nunca lo dude!

Si usted ha aceptado a Jesucristo como su Salvador personal, pero ha sido muy tibio en su caminar espiritual con El, usted necesita pedirle inmediatamente perdón y renovación. El lo perdonará instantáneamente, y llenará su corazón con el gozo del Espíritu Santo. Entonces, necesita iniciar un caminar diario de oración y estudio personal de la Biblia.

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Esperamos que haya sido bendecido por este ministerio, que busca educar y advertir a las personas, de modo que puedan ver el Nuevo Orden Mundial por venir -el Reino del Anticristo-en sus  noticias diarias.

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Dios le bendiga.

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