TITULO: BUENA SUERTE Y FORTUNA

Subtítulo: ¡Dos Términos Que Cristianos Deberían Evitar Usar!

En menos de un año cinco o seis (perdí la cuenta) huracanes/tormentas tropicales han destrozado partes de la Florida y Alabama—estorbando la vida y destruyendo las propiedades de millones. Y mientras limpiaba los relativamente pocos escombros en mi patio por segunda vez, reconocí cuan bueno era Dios en haber protegido otra vez mas mi pequeña esquina del mundo. En ambas ocasiones, los trayectos proyectados de Iván y Dennis se suponían que fuesen directamente sobre, o aún peor en términos de potencial daño –ligeramente al oeste—de nuestro pueblecito del oeste central de Alabama. ¿Orar? ¡Más te vale creer que lo hicimos! Y ambas veces el ojo de la tormenta—totalmente contrario a las proyecciones de último minuto del servicio nacional de meteorología –disminuyó en intensidad y viró hacia el este por 25-30 millas, causando daños mínimos en nuestra área. Nos dijeron que se esperarían vientos sostenidos de entre 70-80 mph, con ráfagas de hasta 100—lo cual hubiese devastado muchos hogares junto con incontables árboles, líneas eléctricas, etc. Pero alabado sea Dios, El consideró bien que fuésemos escatimados.

¿Fuimos afortunados de haber escapado de la furia de esas tormentas? ¿Experimentamos buena suerte en extremo, mientras aquellos quienes sufrieron pérdidas les pasó por mala suerte? Desafortunadamente, (¿ve como palabras relacionadas son parte del idioma español?) a menudo usamos esos términos para describir nuestro alivio (o miseria) después que las tormentas de la vida arrasaron con nosotros. ¡Pero tenemos que entender que para un genuino hijo de Dios no hay tal cosa como la suerte, casualidad, o fortuna! Servimos a un Dios soberano y todo lo que sucede es o (1) causado o (2) permitido por El. Y ya sea que consideremos aquellas cosas buenas o malas, todas ellas tomadas en conjunto son para nuestro bien:

“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.” Romanos 8:28

Y casi puedo oír las respuestas incrédulas de algunos que han sufrido por causa de los huracanes: "¡¡¡¿Entonces quieres decir que la muerte de mis seres queridos y la pérdida de todas mis posesiones mundanas fue para mi bien?!!!" Sí, si eres un creyente en Jesucristo nacido de nuevo, eso es exactamente lo que Dios dice en Su Palabra.

¿Pero cómo algo tan terrible podría ser alguna vez bueno? Bueno, todo depende en cómo lo miremos. ¡El viejo patriarca Job ciertamente no disfrutó perder a todos sus hijos junto con todo lo que poseía cuando Dios literalmente dejó suelto al diablo contra el! (Lea los dos primeros capítulos del Libro de Job para mas detalles). ¡Oh!, Job se quejó y gimió como el resto de nosotros somos propensos a hacer –pero el "no pecó, ni atribuyó a Dios despropósito alguno" (Job 1:22). Y en uno de los más sublimes comentarios jamás hecho por un mortal atormentado por tales circunstancias, dijo Job:

"Y dijo: Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo volveré allá. Jehová dio, y Jehová quitó; sea el nombre de Jehová bendito.” Job 1:21 (RV, énfasis mío).

Job entendió un principio que elude a menudo a creyentes: Dios es soberano en los asuntos de los hombres y aquello que a fin de cuentas le trae honor a El será hecho—a pesar de lo terrible que nos parezca en el momento. Tal sufrimiento—particularmente cuando no es castigo por el pecado --es repugnante para criaturas pecadoras como nosotros porque lo vemos como injusto. Pero la Palabra de Dios dice claramente que Job era su siervo y era "sin culpa" (p.e., un pecado no confesado en su vida)—y aún se le permitió sufrir :

"Y dijo Jehová a Satanás: ¿No has considerado mi siervo Job, que no hay otro como él en la tierra, varón perfecto y recto, [reverentemente] temeroso de Dios y apartado del mal? Job 1:8 (Paralelo Biblia, RV/Amplificada, énfasis mío).

Y no debemos pasar por alto el punto vitalmente importante de que Dios realmente dirigió la atención de Satanás hacia Su siervo preguntando si el lo había “considerado”. Y después al enfatizar la devoción del hombre, piedad personal, e integridad, ¡el efecto neto fue comparable a un matador ondeando una capa roja en frente de un toro violento! El pobre viejo Job fue golpeado por una serie de “huracanes” sobrenaturales generados por el diablo y ¡nunca los vio venir! ¿Pero fue esto el resultado de una farsa por parte de Dios, como algunos parecen creer? El razonamiento carnal insiste que El nunca permitiría que una tragedia tal tocase a uno de Sus amados hijos --¡al menos que estén siendo castigados por comportamiento pecaminoso! Y esa es precisamente la conclusión a la que llegaron los amigos de Job al tratar de consolarlo. Pero ellos estaban totalmente equivocados como podemos ver en las siguientes declaraciones hechas por Dios a ellos:

"Y aconteció que después que habló Jehová estas palabras a Job, Jehová dijo a Elifaz temanita: Mi ira se encendió sobre ti y tus dos compañeros; porque no habéis hablado de mí con rectitud, como mi siervo Job. [8] Ahora, pues, tomaos siete becerros y carneros, e id a mi siervo Job, y ofreced sacrificio por vosotros; porque de cierto a él atenderé para no trataros afrentosamente, por cuanto no habéis hablado de mi con rectitud, como mi siervo Job" Job 42:7-8

La tonta predicción de Satanás de lo que Job haría al ser sometido a una presión extrema probó ser otro ejemplo erróneo de su lógica perversa. El es un ser creado y no omnisciente, pero el posee un estupendo ego (si ese término puede ser aplicado por un ser sobrenatural). Por lo que al permitirle al diablo que tirase su mejor golpe atacando a Job, Dios fue honrado cuando Job pasó la prueba.

Todos los creyentes necesitan aprender de esto que cuando "somos girados en toda dirección sin soltarnos" por las pruebas de la vida, la forma en que respondemos a ello puede ser un testimonio fuerte a otros. Si no nos disolvemos en una masa grasosa de auto-compasión y pesadumbre, nuestro comportamiento será un absoluto contraste a aquello que la mayoría considera normal bajo tales circunstancias. Porque solo la gracia de Dio puede capacitar a alguien a alabarlo a El mientras están en medio de extrema adversidad. Y siempre tiene un profundo efecto sobre aquellos que lo presencian. Muchos mártires cristianos del pasado dejaron un testimonio positivo tras ellos, porque fue dicho de ellos que murieron bien.

Y pensando acerca de este tema, se me ocurrió que hay tres “P” asociadas con las razones por las que sufre el pueblo de Dios: (acabamos de discutir la #1).

(1) Para dar honor y gloria a la Providencia (otro término para Dios).

(2) Por causa de la Penalidad (Castigo).

(3) Por causa de Persecución.

¿Penalidad? ¡Absolutamente! Los padres terrenales castigan a sus hijos por hacer lo incorrecto y Dios hace lo mismo con los Suyos:

"Porque el Señor al que ama, disciplina, y azota a todo el que recibe [acepta y aprecia en su corazón] por hijo " Hebreos 12:6 (Paralelo Biblia, RV/Amplificada).

Y el versículo 8 añade esto:

 "Pero si se os deja sin disciplina, de la cual todos [los hijos de Dios] han sido participantes, entonces sois bastardos, y no hijos [en lo absoluto]. "  Hebreos 12:8 (Parallel Bible, KJV/Amplified).

Por lo que ningún verdadero creyente en Jesucristo deberá ser tan tonto como para pensar que ellos ¡pueden practicar el pecado y salirse con la suya! Nada elude la atención de Dios y tarde o temprano la vara de la corrección será aplicada. La Biblia dice que el Rey David era varón conforme al corazón de Dios (1 Samuel 13:14 y Hechos 13:22), pero lo que no lo eximió de ser castigado después que cometió adulterio con Betsabé y mando a asesinar a su esposo. Misericordia fue extendida después que se arrepintió y su vida fue escatimada (bajo la ley de Moisés, ambos pecados acarreaban pena de muerte), pero como Dios le dijo a través del profeta Natán—la espada nunca se apartaría de su casa (2 Sam.12:10). Y desde aquel día hasta que murió, algunos de los hijos de David continuamente trajeron deshonra a el y a su reino cometiendo actos despreciables de asesinato y traición.

Luego hay Persecución:

"Y también todos quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución; [sufrirán por causa de su postura religiosa]" 2 Tim. 3:12 (Paralelo Biblia, RV/Amplificada).

Si invertimos esta declaración y la vemos desde otro ángulo, podremos ver que un cristiano quien ¡no está sufriendo persecución no está viviendo una vida devota y piadosa en Cristo Jesús! Una vez el Espíritu Santo empiece a morar dentro de la vida de un creyente, comienza la guerra con el público del diablo. Amigos que permanecen en incredulidad se alejarán rápidamente porque la presencia del Espíritu Santo los pone muy incómodos. Y esta es usualmente la primera persecución que enfrenta un Nuevo creyente. Es hostil, pero puede volverse fuertemente hostil si las personas son presionadas cuando se les pide una respuestas de porque ya no vienen. Aún parientes inconversos usualmente exhibirán síntomas de alejamiento. El amor todavía está allí, pero una barrera espiritual e invisible ha venido entre ellos y la frustración de su parte será evidente y se profundizará. Y mientras el creyente crece en gracia y el conocimiento de Jesucristo, habrá un grado correspondiente de separación con el mundo y sus actitudes y acciones. Caminando con el Señor y evitando tales cosas es una afrenta para aquellos que están perdidos y acusarán al creyente de "pensar que ellos son muy buenos" para unirse a ellos en su forma de vida pecaminosa. Entonces cuando el diablo logra usar un asunto público y caliente (tal como el actual debate del aborto) para incitar a violencia en masas, está a solo un pequeño paso de una actitud de resentimiento ardiente sin llama a una de venganza airada ira. Es claro que las específicas son todas diferentes, pero los mártires cristianos fueron llevados a la muerte por la misma reacción básica de la naturaleza humana—de perseguir y eliminar todo aquel quien se atreva a estar en desacuerdo con sus puntos de vista—especialmente aquellos que lo hacen abiertamente.

¿Eres un creyente sufriente? Si es así, definitivamente usted ¡no está experimentando "mala-fortuna"! Dios o lo está castigando por haberse comportado mal o permitiéndole que le honre a El ante los otros exhibiendo una actitud piadosa en medio de la prueba. Así que si usted sabe que hizo algo para merecer Su corrección, entonces arrepiéntete—deja de hacerlo y clama a 1 Juan 1:9:

"Si confesamos [libremente] nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos [continuamente] de toda maldad [todo aquello que no sea conforme a Su voluntad en propósito, pensamiento y acción]" 1 Juan 1:9 (Paralelo Biblia, RV/Amplificada).

Por otro lado, si sabes en tu corazón de que tu comunión con el Señor está firme –pero aún sufres—¡dale al diablo un ojo negro alabando a Dios por el privilegio de hacerlo en Su nombre! Enfrentar la muerte con un sentido de humor y un espíritu dulce es algo que tocará aún los hombres más duros. Quizá nunca sabremos que bien saldrá de este lado de la gloria, pero Dios está llevando cuentas y recompensará abundantemente a aquellos que permanecen fieles.

¿No tenemos "suerte" de tener un Salvador tan maravilloso? (¡Sonrisa abierta grande!)

Si usted ha aceptado a Jesucristo como su Salvador personal, pero ha sido muy tibio en su caminar espiritual con El, usted necesita pedirle inmediatamente perdón y renovación. El lo perdonará instantáneamente, y llenará su corazón con el gozo del Espíritu Santo. Entonces, necesita iniciar un caminar diario de oración y estudio personal de la Biblia.

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Esperamos que haya sido bendecido por este ministerio, que busca educar y advertir a las personas, de modo que puedan ver el Nuevo Orden Mundial por venir -el Reino del Anticristo-en sus  noticias diarias.

Finalmente, nos encantaría saber de usted. Puede enviarnos un E-Mail a 

Dios le bendiga.

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