TITULO: ¡PERO ESO NO ES JUSTO!

Subtitulo: ¿Alguna Vez Ha Sido Usted Tentado Ha Acusar a Dios De Ser Injusto Con Usted?

 

El concepto de lo que es correcto y lo que es incorrecto es un tema de gran interés. Un sin número de libros han sido escritos acerca de principios éticos de cómo los hombres deben interactuar los unos con los otros,  pero tales valores con regularidad varían a lo largo de las diferentes líneas culturales. En muchas ocasiones grandes ofensas toman lugar por parte de un sencillo comentario o gesto de alguien que ignora las “reglas de comportamiento” de una localidad o pueblo. Y debido al hecho de que la percepción de  estas diferencias de aceptación de comportamiento puede causar que los sentimientos del individuo sean afectados, será entonces este un tópico que nos concierne en este artículo.

 

Detrás de la promulgación de la mayoría de reglas y regulaciones figura una conducta inapropiada que hace necesaria dicha promulgación, ¡Puesto que nunca el buen comportamiento ha hecho que se necesite la redacción de reglas! Si viviésemos en un mundo perfecto, las prohibiciones que vemos en los mandamientos de Dios no existirían. Pero debido a nuestra depravada naturaleza caída, debemos mantenernos fiel a Sus estatutos si queremos evitar la anarquía. En el Antiguo Testamento Dios seleccionó he hizo que la nación de Israel fuera su testigo delante del resto de la humanidad. Y al hacer esto Él le dio la Ley de Moisés – El estándar perfecto para una conducta moral y ética. Luego con su llegada, el Mesías Jesucristo, redujo la Ley a su misma esencia:

37 Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. 38 Este es el primero y grande mandamiento. 39 Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. 40 De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas. Mateo 22:37-40 (VRV)

 Mis amigos, si verdaderamente amamos a Dios con todo nuestro corazón, mente y alma, y amamos a nuestros vecinos al mismo grado que nos amamos a nosotros mismos, tendríamos el cielo en la tierra. ¡PERO LA REALIDAD NO ES ESA, EN VERDAD NO HACEMOS ESTO! Esas reglas en realidad nos condenan puesto que nuestras vidas no cumplen con estos estándares de perfección que Dios requiere de nosotros. Por tal razón es que necesitamos con urgencia a un Salvador.

 

Cuando mi hija mayor era solo una niña y se requería disciplinarla, con frecuencia su respuesta ante la disciplina era, “¡no es justo papá!” Desde su punto de vista limitado ella no entendía que su comportamiento no era el adecuado. Y a pesar de que sonreímos cuando recordamos tales momentos, ¡debemos darnos cuenta de que nuestra perspectiva de Dios, el Padre, es tan bien limitada! La Biblia nos enseña que El traerá castigo sobre sus hijos y criaturas cuando: (1) Necesitemos ser disciplinados (Hebreos 12:6) y (2) por razones que van más allá de nuestro entendimiento, puesto que habrán momentos que Dios permitirá que “cosas malas” nos ocurran sin que hayamos cometido ninguna trasgresión (como vemos en Job, capítulo 1 y 2). Soportar la corrección cuando sabemos que viene como resultado de nuestros pecados es una cosa, ¡pero soportar calladamente cuando no tenemos un entendimiento claro de haber fallado es otra cosa! Nuestra carne quiere gritar a Dios, “¡Padre no es justo!” Pero obviamente nuestro concepto de justicia no es el mismo que el de Dios:

7 Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar.  8 Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. 9 Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos. Isaías 55:7-9 (VRV)

Aquellas personas que tratan de entender a Dios y asumen que Él opera de acuerdo a los principios que para nosotros tienen sentido ¡están cometiendo un grave error! La vida algunas veces nos coloca en la posición de ser tentados a preguntar, “¿Por qué yo, Señor?” y por la palabra de Dios su respuesta a nosotros es, “¿Y por qué no tú?”

“Porque a vosotros os es concedido a causa de Cristo, no sólo que creáis en él, sino también que padezcáis por él” Filipenses 1:29 (VRV)

“Y también todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución” 2 Timoteo 3:12 (VRV)

 

El Cristianismo genuino tiene un sitial totalmente diferente de todas las “religiones” al respetar lo que Dios promete a sus hijos, pocas cosas provenientes de una naturaleza tangible. Así que, aquellos quienes insisten que Dios le hará rico si usted “siembra” cierta cantidad de dinero a un ministerio en particular ¡está errado hasta la muerte! ¡Los ministerios que enseñan el principio “Decláralo y será tuyo” tienen una base totalmente antibiblica pues ellos utilizan promesas que Dios hizo al Israel del Antiguo Testamento. En ninguna parte del Nuevo Testamento encontramos nada que se asemeje a tales enseñanzas. Debemos tener el cuidado de dividir correctamente la Palabra de Verdad, pues cuando se yerra en hacer esto el resultado será que muchas personas verán, en el caso de la “siembra”, que sus “inversiones” en tales ministerios no devolvieron las ganancias prometidas por el predicador. Entonces cuando esta oveja disgustada y desflecada se acerque al predicador para cuestionarle, el se esconderá detrás del pretexto “fue por falta de fe” haciendo de esta manera, sin titubeo alguno, que usted gaste cada centavo de su dinero ganado con el esfuerzo de su trabajo. Muchos predicadores inescrupulosos y apostatas están surgiendo por doquier como hierbas (o pozos de alquitrán) y nosotros como pueblo de Dios debemos estar en guardia para evitar ser engañados por uno (o varios) de ellos.  Nunca se sienta culpable en creer algo que yo mismo, o cualquier predicador, diga sin antes asegurarse que lo que se diga sea conforme a la palabra de Dios. E inclusive si lo que se enseña aparenta ser totalmente bíblico, pídale a Dios que a través del Espíritu Santo le dé a usted discernimiento y protección de cualquier doctrina de error – pues hay predicadores que aunque tienen la mejor de las intenciones hacen errores de interpretación.

 

Cuando los problemas de la vida le acosen (nótese que no he dicho “si los..” sino ¡cuando!) y venga a su mente la tentación de pensar que ha sido usted tratado de una manera no justa – ¡tome tiempo para considerar lo que sus pensamientos están haciendo! La materia gris que tenemos entre nuestros oídos alojado dentro de nuestro cerebro es una maravillosa computadora sin embargo es solo un “software” – que contiene un programa – que ha sido seriamente dañado por nuestra naturaleza pecaminosa. Hemos heredado una naturaleza depravada de Adán y nuestra habilidad para ver las cosas como en verdad son es mínima. Es por esto que en el libro de Proverbios dice tantas veces porqué el pueblo de Dios debe de adquirir conocimiento – la habilidad de ver las cosas tal cual como Dios las ve.

 

“El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Buen entendimiento tienen todos los que practican sus mandamientos; Su loor permanece para siempre.” Salmos 111:10 (VRV).

 

“El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.” Proverbios 1:7 (VRV).

 

Si hemos de tener la verdadera sabiduría y conocimiento, Dios debe revelárnoslo a través de Su Palabra:

5 Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia.            6 Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas.” Proverbios 3:5-6 (VRV).

Nosotros erramos terriblemente cuando “nos apoyamos en nuestro propio entendimiento” e intentamos evaluar lo que la vida nos arroja considerándola injusta.

 

¿Acaso usted piensa que fue “justo” que Dios enviara a su único Hijo Jesucristo a esta tierra con el único propósito de morir como sacrificio por nuestros pecados? ¿Acaso fue justo que el inocente y puro Hijo de Dios literalmente se hiciera pecado por nosotros en la cruz (2 corintios 5:21) recibiendo en si mismo la ira de Dios en contra del pecado? ¿Acaso fue justo para Jesús pasar hambre, sed y vivir en pobreza?

 

De no tener el entendimiento espiritual correcto, ¿No estaríamos en lo cierto en decir, sin duda alguna, que Jesús fue tratado injustamente?

 

Así que cuando la vida inevitablemente trae consigo una situación que violenta nuestra zona de tranquilidad y confort, somos tentado a cuestionar a Dios pensando que hemos sido tratados injustamente – solo deténgase y considere lo limitado de nuestro pensamiento comparado con el de Dios.

 

“Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias.” Lamentaciones 3:22 (VRV)

 

Mis amigos, la única razón por la cual usted y yo continuamos respirando es por la gracia de Dios. Y no importa que tan mala sea su presente situación, o pueda ser en el futuro – ¡solo deténgase y considere todo lo que nuestro Señor Jesús soportó para darnos libertad!

Si usted ha aceptado a Jesucristo como su Salvador personal, pero ha sido muy tibio en su caminar espiritual con El, usted necesita pedirle inmediatamente perdón y renovación. El lo perdonará instantáneamente, y llenará su corazón con el gozo del Espíritu Santo. Entonces, necesita iniciar un caminar diario de oración y estudio personal de la Biblia.

Si usted nunca ha aceptado a Jesucristo como Salvador, pero ha comprendido Su realidad y el Fin de los Tiempos que se acerca, y quiere aceptar Su regalo GRATIS de la Vida Eterna, usted puede hacerlo ahora, en la privacidad de su hogar. Una vez lo acepte a El como Salvador, usted habrá Nacido de Nuevo, y tendrá el Cielo tan seguro como si ya estuviera allí. Entonces, podrá descansar seguro de que el Reino del Anticristo no lo tocará espiritualmente.

Si a usted le gustaría Nacer de Nuevo,  vaya ahora a nuestra Página de Salvación .

Esperamos que haya sido bendecido por este ministerio, que busca educar y advertir a las personas, de modo que puedan ver el Nuevo Orden Mundial por venir -el Reino del Anticristo-en sus  noticias diarias.
 

Finalmente, nos encantaría saber de usted. Puede enviarnos un E-Mail a 

Dios le bendiga.
 

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